.Coldplay. Fix You (Te confortaré)  

 

«tomad, esto es mi cuerpo»

 
  

 
 
 
 
 
 
Lectura del libro del Éxodo

En aquellos días, Moisés bajó y contó al pueblo todas las palabras del Señor y todos sus decretos; y el pueblo contestó con voz unánime: «Cumpliremos todas las palabras que ha dicho el Señor».
Moisés escribió todas las palabras del Señor. Se levantó temprano y edificó un altar en la falda del monte, y doce estelas, por las doce tribus de Israel. Y mandó a algunos jóvenes de los hijos de Israel ofrecer al Señor holocaustos e inmolar novillos como sacrificios de comunión.
Tomó Moisés la mitad de la sangre y la puso en vasijas, y la otra mitad la derramó sobre el altar. Después tomó el documento de la alianza y se lo leyó en voz alta al pueblo, el cual respondió: «Haremos todo lo que ha dicho el Señor y le obedeceremos».
Entonces Moisés tomó la sangre y roció al pueblo, diciendo: «Ésta es la sangre de la alianza que el Señor ha concertado con vosotros, de acuerdo con todas estas palabras»

Éx 24,3-8

Salmo Responsorial

R. Alzaré la copa de la salvación,
invocando el nombre del Señor.

¿Cómo pagaré al Señor
todo el bien que me ha hecho?
Alzaré la copa de la salvación,
invocando el nombre del Señor.   R

Mucho le cuesta al Señor

la muerte de sus fieles.
Señor, yo soy tu siervo,
hijo de tu esclava:
rompiste mis cadenas. R

Te ofreceré un sacrificio de alabanza,
invocando el nombre del Señor.
Cumpliré al Señor mis votos
en presencia de todo el pueblo. R

Sl 115,12-13.15-16.17-18 (R.: 13)

Lectura de la carta a los Hebreos
Hermanos:
Cristo ha venido como sumo sacerdote de los bienes definitivos. Su «tienda» es más grande y más perfecta: no hecha por manos de hombre, es decir, no de este mundo creado. No lleva sangre de machos cabríos, ni de becerros, sino la suya propia; y así ha entrado en el santuario una vez para siempre, consiguiendo la liberación eterna.
Si la sangre de machos cabríos y de toros, y la ceniza de una becerra, santifican con su aspersión a los profanos, devolviéndoles la pureza externa, ¡cuánto más la sangre de Cristo, que, en virtud del Espíritu eterno, se ha ofrecido a Dios como sacrificio sin mancha, podrá purificar nuestra conciencia de las obras muertas, para que demos culto al Dios vivo!
Por esa razón, es mediador de una alianza nueva: en ella ha habido una muerte que ha redimido de los pecados cometidos durante la primera alianza; y así los llamados pueden recibir la promesa de la herencia eterna.

Heb 9,11-15

Lectura del santo Evangelio según san Marcos

El primer día de los Ázimos, cuando se sacrificaba el cordero pascual, le dijeron a Jesús sus discípulos: «¿Dónde quieres que vayamos a prepararte la cena de Pascua?». Él envió a dos discípulos diciéndoles: «Id a la ciudad, os saldrá al paso un hombre que lleva un cántaro de agua; seguidlo, y en la casa adonde, decidle al dueño: “El Maestro pregunta: ¿Cuál es la habitación donde voy a comer la Pascua con mis discípulos?”.
Os enseñará una habitación grande en el piso de arriba, acondicionada y dispuesta. Preparádnosla allí». Los discípulos se marcharon, llegaron a la ciudad, encontraron lo que les había dicho y prepararon la Pascua.
Mientras comían, tomó pan y, pronunciando la bendición, lo partió y se lo dio diciendo: «Tomad, esto es mi cuerpo».
Después tomó el cáliz, pronunció la acción de gracias, se lo dio y todos bebieron. Y les dijo: «Esta es mi sangre de la alianza, que es derramada por muchos. En verdad os digo que no volveré a beber del fruto de la vid hasta el día que beba el vino nuevo en el reino de Dios».
Después de cantar el himno, salieron para el monte de los Olivos.

Mc 14,12-16.22-26

"La sang de Crist ens purifica de les obres mortes"

Hi ha realitats cristianes tan profundes que no les podem abastar amb una paraula o una reflexió. Això passa amb l’Eucaristia o en la seva festa per excellència que és el Corpus que celebrem avui. El nom és «solemnitat del Cos i la Sang de Crist». I precisament enguany la Paraula de Déu fixa la nostra atenció en la sang de Crist, present en l’Eucaristia. Per una banda ens recorda l’aliança de Déu amb els homes. Ho veiem en la primera lectura: Moisès aspergí el poble amb la sang i digué: Aquesta és la sang de l’aliança que el Senyor fa amb vosaltres d’acord amb les paraules escrites aquí. L’aliança és el pacte que fa Déu amb el poble pel qual el poble es compromet a seguir totes les normes de l’aliança: El poble respongué: Farem tot el que diu el Senyor, l’obeirem en tot. La sang aspergida indica la voluntat del poble de seguir la llei del Senyor, és el seu compromís amb Déu. Per altra banda, aquesta sang també era el perdó dels pecats. Diu la carta als hebreus: La sang dels bocs i dels vedells i la cendra de la vedella, aspergida sobre els qui estaven contaminats, purificava i santificava exteriorment. Però la sang dels animals només era una ombra de la veritable sang que salva els homes: Crist s’ha ofert ell mateix a Déu com a víctima sense tara. Per això continua la segona lectura: Amb molta més raó, la sang del Crist ens purificarà de les obres que porten la mort perquè puguem donar culte al Déu viu. Ell ha mort en rescat de les culpes comeses sota la primera. Bevent la sang de Crist en l’Eucaristia rebem el perdó dels pecats i som capaços de complir veritablement la voluntat de Déu. Per això l’evangeli ens narra aquest moment que Crist es fa present en el pa i el vi. Jesús prengué el pa i digué: Preneu-lo: això és el meu cos. Després prengué el calze i digué: Això és la meva sang, la sang de l’aliança, vessada per tot els homes. L’Eucaristia, doncs, és el perdó dels nostres pecats i la força que necessitem per a ser fidels a Déu, per respondre al pacte d’amor que Déu ha fet amb els homes.

Mn. Jaume Pedrós

Música Sacra

Con el nombre de Música Sacra agrupamos las obras musicales cristianas que a lo largo de la historia han creado los grandes compositores para destacar la obra de Dios. Nació en Europa en la Alta Edad Media con los ritos cristianos en el ámbito de las iglesias. Los antiguos cantos medievales dieron paso a las Misas y Cantatas del Barroco.

La época dorada de la música religiosa se inicia con los cantos gregorianos, alcanzan la mayoría de edad con Johann Sebastian Bach, continúa con Mozart y finaliza con las Misas de Beethoven. Mas tarde la musica sagrada deja de tener tanta importancia en la vida social y los compositores se acuerdan de ella excepcionalmente.

Glória de Vivaldi

Réquiem de Mozart Passió segons sant Joan. Bach
El Messies de Händel I El Messies de Händel II El Messies de Händel III
La Passió segons sant Mateu I La Passió segons sant Mateu II Messa da Réquiem de Verdi


 

  

 

 
 
 
IMAGENES